Las abejas juegan un papel esencial en el desarrollo de los ecosistemas. Hacen una parte de la familia de los insectos, y la construcción de su reino es muy organizada. Además de esto que merced a la miel, se ha creado una industria que solo este año, con nuevas medidas en el cuidado de los animales, pretende llegar a cuatro mil toneladas de miel beepure.
Cada abeja tiene una función concreta. Primero está la abeja reina, su primordial labor consiste en poner huevos y las abejas obreras se hacen cargo de nutrirla. Las celdas que son construidas por las reinas son llamadas realeras y su tamaño es mayor al del resto. Esas larvas son alimentadas con jalea real con la intención de que sea fértil y su tamaño las distinga de las abejas normales. Cabe apuntar que solo una abeja reina puede morar una colmena.
Una vez ha nacido, la reina es fecundada por los zánganos a fin de que en el trascurso de su vida deposite huevos en las celdas para que nazcan nuevas abejas obreras.
La abeja reina puede tener un periodo de vida de hasta 5 años y es respetada por el resto de la colmena. Son reemplazadas de forma natural entre exactamente la misma colmena.

Le prosiguen los zánganos y las obreras. Los primeros nacen de huevos sin fecundar, son más robustos que las abejas obreras y su función primordial es fecundar a la abeja reina.
De otro lado, las obreras, en contraste a el resto, son las encargadas de hacer el resto de tareas. Desde su nacimiento, pasa por los diferentes eslabones de la cadena: hacen cera, limpian, nutren, observan, y recogen néctar y polen.
Adrián Barrera, gerente de Apiarios Adrián Barrera, aseveró que el papel de las abejas en el ecosistema “son de vital relevancia en tanto que como planeta, dependemos de ellas, polinizan cerca del setenta y cinco por ciento de la producción mundial de comestibles. Cuando se escasea el número de abejas, la productividad baja, además de esto se aprecia en la calidad de los productos, puesto que los frutos tienden a nacer irregulares y con un peso menor”.
Por su lado, Fabio Diazgranados, presidente de Fedeabejas, asevera que en Colombia, el noventa por ciento de los apicultores tiene apiarios tipo, esto es, aquellos que tienen en promedio veinte colmenas. “No hay apicultura intensiva en el país, son contados los que son grandes apicultores, aquellos quienes tienen más de quinientos colmenas. En Colombia se hace apicultura campesina, juntamente con otras actividades del campo, eso es parte de lo que significa el enorme complejo agrícola del país”.
Ahora bien, en dos mil dieciocho murieron dos mil quinientos colmenas en el país, al menos esa fue la cantidad reportada por los apicultores, el gremio asevera que pudo ser una cantidad mayor. Los ayuntamientos más perjudicados fueron Córdoba, Val del Cauca y Meta. Acá brotan 2 inconvenientes: el primero es que no todos y cada uno de los apicultores están registrados por la actividad económica que ejercitan y eso causa que no hay una radiografía precisa de la apicultura en el país. Además de esto, el sistema actual para reportar las cantidades de muerte de abejas es un tanto complejo para quienes hacen una parte de este eslabón.
El segundo inconveniente que se advierte a causa de la muerte de estas colmenas es el empleo de insumos agroindustriales en los cultivos alrededores a las colmenas.
Lennis Paola Camargo, gerente de Apiarios El Yarumo, aseveró que estos hechos son consecuencia del empleo inapropiado que se le ha venido dando a los agroinsumos. “Esto tiene múltiples factores, entre ellos, la falta de conocimiento por la parte de los campesinos sobre las cantidades que han de ser aplicadas a los cultivos a fin de supervisar los cultivos de su predio. Eso afecta a la calidad de vida de las abejas de forma directa”.
El ámbito apícola piensa que se debe ampliar el fantasma. La apicultura produce prácticamente tres mil trabajos directos y seis mil indirectos. Además de esto, es una tarea que puede ser desarrollada en conjunto con otras actividades del campo. Lo esencial es cercar realmente bien la zona donde ubique el apiario a fin de asegurar la seguridad del ambiente, de manera especial si tiene animales a una distancia corta.