El equipo de ingenieros agrónomos de Rosario ha desarrollado una app que revolucionará el seguimiento de cultivos. La NASA participa en el proyecto.
Lo mejor de la tecnología es que trae nuevas soluciones a viejos problemas. Como muchas de las grandes ideas de la humanidad, SIMA nació de la necesidad de resolver un problema en particular.
En ese momento, Jerónimo Oliva y Mauricio Varela estaban preparando su tesis en la Facultad de Agricultura de Rosario. Todo se complicó cuando perdieron sus cuadernos escritos a mano con datos de cultivos. Fue así como comenzaron a formarse los emprendimientos tecnológicos que hoy en día están asociados a la NASA.
Todo comenzó en 2015 cuando estos dos amigos crearon el Sistema de Monitoreo Agropecuario (SIMA), una agtech que contiene una gran base de datos de información agropecuaria.
El ingeniero de sistemas Andrés Yerkovich se sumó entonces al proyecto y desarrolló una app que permite a productores y estudiantes llevar todo este conocimiento en sus celulares de una manera fácil. El proyecto sigue creciendo y ahora cuenta con un equipo de trabajo de 30 personas.
Desde Argentina, se expandió a otros países de América, incluidos Brasil, Paraguay, Uruguay y México. Pero el verdadero avance se produjo en 2019 con la NASA. Parece una película de ciencia ficción, pero es real.
SIMA se asoció con el programa NASA Harvest, desarrollado en la Universidad de Maryland y financiado por la NASA, para trabajar en algoritmos para estimar la producción agrícola.
La NASA ha desplegado satélites para este propósito.
Para estimar el rendimiento, parte de la información se obtiene del espacio. Luego se compara con lo que han informado los usuarios de la aplicación SIMA. El algoritmo tiene una tasa de éxito superior al 80% y puede predecir los resultados de la cosecha con meses de antelación.
Además, los agricultores pueden consultar el estado de sus cultivos en sus celulares, por lo que no tienen que ir al campo con frecuencia.
La app está diseñada para todo tipo de producción agrícola, desde grandes cultivos intensivos hasta economías locales. Desde trigo y soja hasta uvas, patatas y tomates. Y para todo tipo de clientes: los usuarios de SIMA son tanto grandes empresas como medianos productores.
A la fecha, SIMA monitorea 3 millones de hectáreas en la región y estima monitorear 5 millones de hectáreas a fin de año. Las ventas en 2020 fueron de $1 millón. Esperan triplicar ese número este año.
Así, algo que empezó como una forma de solucionar un problema común de los agricultores se convirtió en un emprendimiento millonario que generó puestos de trabajo e involucró a la propia NASA.
Acerca de SIMA
SIMA es un sistema agrícola inteligente que permite el seguimiento de lotes, localización de datos, análisis de información y generación de órdenes de aplicación para su gestión.
¿Cómo funciona?
Recopilación y localización de datos de campo
Lo inteligente es que el mismo sistema puede registrar malas hierbas, plagas y enfermedades, o simplemente tomar fotografías, notas de voz y texto.
Visualización y análisis de información
A través de tablas, gráficos y mapas interactivos.
Generar y compartir informes
Comunique automáticamente el estado de los lotes y el resultado de las decisiones a través de órdenes de trabajo.
Funciones destacadas
Control de Stand de Plantas: Le permite contar las plantas y su distancia con una simple foto tomada con su celular.
Beneficios:
- Sentido práctico;
- Ahorra tiempo con lote;
- No se necesita cinta métrica para el monitoreo.
Manejo de la severidad: El control de severidad del cultivo o el manejo de enfermedades ahora se puede hacer a través de la fotografía.
Beneficios:
- Armonización de estándares entre equipos de trabajo;
- Mayor reducción de tiempo en lotes.